A mí cuando
llega el 31 de octubre víspera de la celebración cristiana de todos los Santos,
se me pone una cierta animación en el cuerpo. Y es que deseo tanto celebrar
Halloween, que ese día, el 31 me habría gustado disfrazarme de algo tétrico, como
por ejemplo, la figura de la muerte con una guadaña, o si no de zombie
atemorizando y haciendo bromas yendo en el profundo silencio de la noche a las
casas de aquellas familias que estén tranquilas y provocar un gran susto.
Aunque
Halloween es una fiesta de origen Celta, también se celebra en Canadá, Estados
Unidos, Irlanda o Reino Unido, y en menor proporción en España.
Por eso digo
que aunque fuese solo un día, me hubiera gustado ser americano para festejar
ese evento tan especial: Halloween.
Hasta otra
amigos.
Yo no soy de disfrazarme pero si tuviera que hacerlo, lo haría de zombie pouqe me gustán.
ResponderEliminarSi tú me das un susto, la próxima pensaré cómo y a qué disfrazar o sin eso el devolverte el susto.
Gran post, Jon :).
Muchas gracias Gonzalo por tu apoyo.
ResponderEliminarAquí organizamos una fiesta en la que participa bastante gente. El año próximo, te vienes, nos ayudas y participas.
ResponderEliminarMu amable Octavio. Muchas gracias.
ResponderEliminarEL AÑO QUE VIENE PUEDES ORGANIZAR UNA FIESTA .UN SALUDO
ResponderEliminarGracias anónimo, otro saludo para tí.
ResponderEliminar