jueves, 18 de noviembre de 2021

La casa maldita

Seis amigos se encuentran de expedición en la aldea de Kofonov en la ciudad de Nuevo Día (Estados Unidos). Allí se encuentra la casa maldita. En la más profunda oscuridad de la noche entran a la casa. Aunque el lugar es bastante tenebroso, estos seis amigos se arman de valor y deciden entrar a investigar.

Abren la puerta; chirria un poco y entonces comienza la noche más terrorífica de todas. Las bombillas de la casa empiezan a parpadear por lo que en cualquier momento puede producirse el apagón. Uno de los amigos, John, pregunta a Arnold si lleva su linterna en caso de que las bombillas se apaguen. Arnold contesta que se la ha dejado en el coche. Entonces salta el pánico en el grupo porque temen lo peor.

La casa maldita no dispone de calefacción ni de luces que puedan ayudar a ver a estos muchachos. De repente, uno de los chavales oye un ruido extraño proveniente del sótano y como es habitual va a explorar. Roux va bajando con cierto temor las escaleras sin mirar atrás pues tiene la ligera sospecha de que si lo hace se puede encontrar a la gran presencia demoniaca como es la mujer de negro, el ángel de la muerte sentada en su mecedora. Inexplicablemente la mujer de negro desaparece dejando su mecedora sola balanceándose. Roux, muy despacio, se aproxima a la mecedora y de repente la presencia le toma del cuello tratando de asfixiarla.

Roux intenta soltarse con todas sus fuerzas pero no lo logra. El ángel de la muerte la tiene atenazado con sus garras. Mientras, sus amigos quedan atormentados por los demonios y espíritus que salen por doquier hipnotizándoles.

Roux le suplica a la mujer de negro que por favor la suelte y así sus amigos y ella puedan salir de la tenebrosa casa.

Los demonios atormentan a los jóvenes que quieren salir pero… el maligno acecha y parecen no tener escapatoria. Los demonios les indican que vayan a la habitación del terror. Tanto ella como sus amigos continúan hipnotizados. Aguardan en la habitación en silencio y sin hacer ningún ruido, ya que en cualquier momento los demonios podrían hacer acto de presencia.

Cuando la casa parece estar tranquila intentan abrir la puerta de la habitación en busca de aire, pero está bloqueada y no saben la contraseña. Quien si la sabe es el señor Millagie que inteligentemente logra salvar a los jóvenes del peligro. Poco a poco se recuperan del mal trago que han sufrido y juntos salen de la casa maldita.

Una experiencia espantosa que sin duda han cambiado sus vidas para siempre.

Saludos.

8 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Buena historia inventada.

    ¿Sabes que los fantasmas existen? yo pensaba que no pero sí. He estado leyendo sobre el tema y según tengo entendido son difuntos del purgatorio. Es decir, son almas que se aparecen para pedir oraciones y el permitir su aparición no son ellos sino que es Dios el que permite ese fenómeno. Además, la cosa es tan sorprendente que puede pasar que tú veas a un familiar tuyo y tus padres no. Si alguna vez te pasa eso, pues mejor no comentes nada a tus padres y contar por ejemplo a mí o a un sacerdote católico. Y si alguna vez te pasa sólo pregunta ¿qué necesitas para descansar? porque preguntarle cosas como ¿dónde dejaste tus joyas o cuál era la clave de tu caja fuerte y etc? eso está mal. Está mal porque ¿cómo te sentirías tú pidiendo ayuda a alguien y recibes nada de ayuda sino otra cosa?

    Saludos.

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  3. Te he dado esos consejos porque así hay menos posibilidades de que sufras incomprensión, para especificar mejor contar eso a los exorcistas ya que suelen encontrarse esos fenómenos en las casas embrujadas. Además, si tú eres el único de tu familia el que vive esas experiencias suele pasar que sufras la incomprensión y te cuento esto porque a mí me ha pasado estos pocos años pues eso, el tener experiencias raras del enemigo aunque fueron suaves y sufrir la incompresión. Yo expresaba a mis familiares con el esfuerzo de hacerme entender pero nada, sólo me entendía lo que vivía Dios y yo. Lo expresaba porque el soltar las cosas es una manera de soltar el dolor que uno lleva dentro.

    En resumen, una manera de entender las cosas es vivir con experiencias porque a veces se entiende mejor a alguien vivir la misma experiencia que el escucharle. Por ejemplo:

    No es lo mismo escuchar a alguien que diga "que bueno es el solomillo" que vivir la experiencia de probar ese alimento. Pues del mismo modo pasa con las experiencias sobrenaturales.

    Saludos.

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  4. No suelo ver nada de miedo porque no me quiero meter en líos. Me gusta ver cosas bonitas para que luego trasmitir a los que me rodean la alegría. Aunque me vean como loco de alegría, pero por lo menos es algo agradable.

    Saludos.

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  5. Una cosa más que añadir es que las almas del purgatorio no trasmiten miedo pero meten ruidos a veces para que nosotros los vivos sepamos que están ahí. Si te gusta el tema te recomiendo ver el museo que hay en Roma y el libro de la escritora "María Vallejo Nagera" y se llama el libro "Entre el cielo y la tierra".

    El libro trata de experiencias de personas que han visto a las almas del purgatorio y la escritora les entrevistó. Hay partes divertidas y otras un poco aburridas pero aún así es un libro recomendable para leer.

    Otra cosa que comentar es que no celebro hallowen porque el Dios al que creo es de vivos y no de muertos y porque lo que hay que trasmitir es esperanza a la gente y no lo contrario.

    Saludos.

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    1. Si pones en youtube "museo de las almas del purgatorio en roma" podrás ver videos. Y el libro que te dije te lo envio por email por si quieres leerlo gratis y en el ordenador.

      Saludos

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  6. última cosa por comentar es que cuando el demonio te ataca más allá de la tentación uno lo pasa fatal y lo cuento porque lo he experimentado. Entre esas cosas es que no puedes dormir aunque te esfuerces en hacerlo. Además, el sentir un espíritu encima tuya es una sensación que no se puede explicar con palabras humanas sino que me podrías entenderme si tú algún día lo experimentas.

    Ah y alguans veces cuando he expulsado a un espíritu malo he escuchado el grito y de repetente desaparece y otras veces desaparece y nada más. Y otras veces te enteras de que ha llegado un espíritu malo por el olor sobrenatural que no es agradable.

    Y para terminar lo que no le gusta a los demonios es que la gente rece y alabe (aunque la alabanza es un tipo de oración) a Dios. Pongo entre paréntesis para diferenciar un tipo de oración con otra.

    No puede soportar el maligno que la gente vaya a los sacramentos y alabe Dios porque en los sacramentos uno se fortalece y de la alabanza el maligno se tapa los oídos (digo en figurado porque los demonios no tienen forma aunque se les dibuje para haya algún símbolo para nuestro idioma humano).

    Saludos.

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